Para ninguna es un secreto los días se pasan volando y por más que quisiéramos encontrar espacios libres para dedicar más tiempo a la familia a veces sentimos que no lo logramos.

Es probable que muchas lleguemos a sentir inclusive culpa por no poder estar más con nuestros seres queridos y que esa frustración termine haciéndonos explotar.

Sabemos cómo te sientes, es por eso que queremos regalarte unas ideas para que logres alcanzar el balance entre tu vida profesional y familiar de manera que puedas alivianar la carga.

Flexibilidad laboral:

1. Algunas de nosotras contamos con una profesión o desempeñamos un oficio que nos permite trabajar por horas, acomodar horarios o trabajar desde casa. Analiza si esa es tu posibilidad y empieza a ver el abanico de oportunidades que podrían abrirse para ti bajo esta modalidad. Trata de quitarte el esquema de la cabeza de que solo si cumples un horario o eres empleada puedes ser productiva, eso no es cierto.
2. Si  tienes una hora para almorzar podrías emplear solo 30 minutos para comer en lugar de la hora completa y así salir un poco antes para llegar más temprano a casa.
3. Negocia con tu jefe: explícale lo importante que es para ti ahora tu rol de madre, explícale que ahora no es tan sencillo trabajar horas extra como lo hacías antes, busca un equilibrio que te permita cumplir tus obligaciones en la oficina y también en casa.
4. Tiempo para extraerte leche: En Costa Rica es un derecho, así que deja en claro que la lactancia es algo que promueves y vives (si es que lo haces) por eso vas a requerir tiempo para sacarte leche varias veces al día.

El cuidado de los niños:

1. Dedica tiempo para buscar una guardería: esto es de suma importancia si sabes que tienes que incorporarte a la vida laboral inicia al menos un mes antes de reingresar la bùsqueda, no es simple delegar a nuestros hijos de ahí la importancia de que encuentres un lugar que te haga sentir segura.
2. Analiza si algún familiar puede ayudarte con esta mega tarea, al menos hasta que tu hijo cumpla su primer año de vida.
3. Hay  mamás que han compartido su satisfactoria experiencia de haber logrado encontrar una guardería cerca de su lugar de trabajo y en su hora de almuerzo van a amamantar al bebé, cosa que brinda mucha tranquilidad.
4. Contrata una niñera en casa: además de ahorrarte mucho tiempo en desplazar al bebé a otro lugar, tienes la ventaja de que él seguirá en su área de confort además en los tiempos que este descanse pueden ayudarte con algunas labores de limpieza.

Tiempo de calidad no cantidad:

Esta no es una premisa fácil porque usualmente las mamás somos tan exigentes con nosotras mismas que por más entrega nunca nos parece suficiente.

Sin embargo ante la limitación de horarios y las múltiples ocupaciones requieres comprender que es mejor tener tiempo de calidad que mucha cantidad. por eso te sugerimos:

1. En tu tiempo libre asegúrate de dedicar tiempo para jugar, hacer masajes, cantar canciones contar cuentos…
2. Contrata si te es posible una persona que te ayude con quehaceres domésticos al menos una vez por semana, eso te dará más tiempo para dedicarle a la familia.
3. Llega del trabajo y en lugar de encender la Tv dedícate a jugar, hacer bocadillos saludables, escuchar música en fin tiempo solo con tu familia.

Y ¿la limpieza?

Esto no es simple, pero cae en cuenta que, no puedes perder todo tu tiempo libre limpiando y lavando, si bien es cierto es una necesidad requieres encontrar un equilibrio, reorganízate.

1. Haz ciclos de lavado entre semana y durante la noche.
2. Lava los platos de la cena
3. Recoge los regueros más visibles, pon todo en su lugar
4. Consigue a alguien que una vez a la semana haga la limpieza profunda, tu dedícate a mantener las cosas en su sitio.
5. Comparte tareas con tu pareja.
6. Entiéndelo de una vez por todas una vez que eres madre no existe el orden ni la limpieza perfecta, el caos es parte de esta nueva etapa.

Tiempo para ti:

No eres  la mujer maravilla, necesitas tiempo para ti para descansar, leer un libro, distraerte, para darte una ducha de al menos 15 minutos y a solas, para limarte las uñas… para tantas cosas.

Así que toca buscar de donde no hay y hacerlo como algo obligatorio.

1. Acuesta a los niños temprano, 1 hora que tengas libre ya es mucho.
2. Inventa el día de la tía, la abuela, la vecina… una vez por semana permítele a una amiga o un familiar chinear a tu bebé unas dos horas en la tarde o noche y regálate ese tiempo.
3. Deja el bebé con papá, ellos solitos sin que siquiera te escuchen, no tienes que salir de casa si no lo deseas simplemente déjalos a solas y relájate.

Deseamos que estos consejos te sean de mucha utilidad en esta nueva vida de mamá ejecutiva, puedes lograr un balance ideal, quizá al inicio no sea tan simple, pero con perseverancia, paciencia y un poco de ayuda vas a lograrlo.