Emociones Intensas: ¿Qué hacer con ellas?

Sin darnos cuenta, muchas veces acumulamos tantas emociones dentro de nuestro organismo que puede llegar un día en que estallamos y pueden llegar a relucir aquellas partes que no conocíamos de nosotros mismos, que no nos gustan porque nos llevan a no tener el éxito deseado y que además los que nos rodean no gustan de nosotros… ¡Claro! ¿Cómo les va a gustar esa faceta nuestra si con ella los lastimamos?

Toda emoción negativa acumulada tiende a salir en un momento determinado y no de la manera más adecuada; puede ser a través de beber alcohol, morderse la uñas, gritar, atacar a otro, aislarse, reprimirse, insultar y hasta dar puñetazos a la pared.
Por eso, en esta oportunidad quiero compartir cuatro técnicas que son muy fáciles de aplicar y son útiles para controlar las reacciones que se pueden manifestar en nosotros antes, durante y después de enfrentarnos a situaciones emocionalmente intensas.

1. Respiración Profunda
• Inspirar profundamente mientras se cuenta mentalmente hasta 4
• Mantener la respiración mientras se cuenta mentalmente hasta 4
• Soltar el aire mientras se cuenta mentalmente hasta 8
• Repite el proceso anterior

2. Parar el Pensamiento
Esta estrategia se orienta al control del pensamiento. Se sugiere sustituir el pensamiento negativo por uno positivo. Se necesita disciplina para darle vuelta al pensamiento negativo y convertirlo en uno positivo. Se presentan algunos ejemplos a continuación:
PENSAMIENTOS NEGATIVOS PENSAMIENTOS POSITIVOS
Soy un fracaso Me voy a esforzar y voy a tener éxito
No puedo soportarlo Soy fuerte, voy a salir bien de esta situación
Me siento desesperado Preocuparse no facilita las cosas
Todo va a salir mal Lo voy a lograr

3. Relajación Muscular
• Siéntese tranquilamente en una posición cómoda. Cierre los ojos.
• Relaje lentamente todos los músculos de su cuerpo, empezando con los dedos de los pies y relajando luego el resto del cuerpo hasta llegar a los músculos del cuello y la cabeza.
• Una vez que haya relajado todos los músculos de su cuerpo, imagínese en un lugar pacífico y relajante (por ejemplo, en una playa, parque, o algún lugar que le sugiera descanso).
Cualquiera que sea el lugar que elija, imagínese totalmente relajado y despreocupado.
Practique este ejercicio al menos una vez al día durante unos 10 minutos.

4. Ensayo Mental
• Esta técnica está pensada para ser empleada antes de afrontar situaciones en las que no nos sentimos seguros. Consiste simplemente en imaginarse que está en esa situación (por ejemplo, en una entrevista de trabajo) y que lo está haciendo bien, a la vez que se siente totalmente relajado y seguro.
• Practicar mentalmente lo que va a decir y hacer.
• Repetir esto varias veces, hasta que empiece a sentirte relajado y seguro de sí mismo.
Si hacemos de estas técnicas parte de nuestra consciencia y de nuestro aprendizaje, vamos a tener una herramienta muy útil para auto ayudarnos. Así que los invito a aplicarlas en su vida diaria. ¡Les aseguro que si son consistentes en practicarlas tendrán muy buenos resultados!

Claudia Cuyún
Psicóloga

Hogar y Familia

Aprende a enriquecer la armonía y equilibrio familiar.