Sin duda te ha pasado más de lo que quisieras, te has enamorado de esos zapatos espectaculares, pero luego de usarlos el primer día te das cuenta que eso que tienen de hermosos lo tienen de incómodos.
Sabemos que quisiera encontrar la manera de estirarlos un poco para que usarlos no sea un suplicio que acaba con extremo dolor de pies.
Por eso hoy en elclubdelamujer.com te compartimos algunos tips para que esos molestos zapatos se conviertan en confortables y candidatos a ser usados con frecuencia.
El calor del aire caliente hará que el tejido de los zapatos se estire, debes ponerte unas medias gruesas + los zapatos, encender la secadora y luego caminar por unos minutos. Hazlo tantas veces consideres necesario.
- Desodorante en barra: Utiliza desodorante en barra para pies, aplícalo en talones, sobre los dedos, en los huesos laterales, te ayudará a minimizar la fricción que se produce entre el zapato y el pie.
- Talco: te ayudará al igual que el desodorante a evitar la fricción del pie.
- Curitas: Evitarán la formación de ampollas.
- Bandas de silicón: Se colocan dentro del zapato, usualmente en el área de los talones o a los lados, las consigues en supermercados, zapaterías y hasta en farmacias, harán de tus zapatos algo súper confortable. Existen inclusive algunas para la planta del pie y si te aseguras de compara unas de calidad sentirás que caminas en algodón.
- Bolsas de agua y al congelador: Pon bolsas de agua en los zapatos y mételas en el congelador, déjalos durante la noche y listo.
- Papel + alcohol: Humedece papel blanco (para evitar teñir los zapatos) mételo dentro de los zapatos y déjalos reposar toda la noche.
