¿Con cuánta frecuencia la gente te calcula más años de los que realmente tienes?

Nos pasa a muchas y con más frecuencia de la que nos gustaría. La edad que denotas depende de múltiples factores y aunque no lo creas algunos son absoluta y fácilmente reversibles justo en este artículo te contamos a que nos referimos.

Más vale que prestes atención y corrijas todos los que puedas, verás como cambia tu ascpecto físico, todos lo notarán.

• Dietas bajas en grasa: Con ese afán de perder peso muchas solemos reducir al mínimo el consumo de grasa, el asunto con esto es que, va en detrimento de nuestra piel, su elasticidad y su apariencia joven y tersa. Toma en cuenta que las grasas son justamente las encargadas de combatir el brote prematuro de arrugas. Así que no dejes de consumirla. Los ácidos ricos en Omega 3 son las ideales.
• Tomar líquidos con pajilla: Suena tan rídiculo, pero esto genera que de forma prematura aparezcan arrugas en el contorno de la boca y los ojos, lo mismo consigues cuando fumas. ¡Evita ambas practicas!

• Dormir de lado y con almohada: Esto con el paso de los años solo suma arrugas a tu expresión facial, seguramente ya lo has notado, esa marca en la cara cuando queda el cachete aplastado contra la almohada. Bueno pues lo ideal es dormir boca arriba.
• Usar proptector solar solo en vacaciones: El sol daña nuestra piel siempre, en todo momento no solo cuando estamos en la playa, inclusive si el día está oscuro hay exposición. Acostúmbrate a usar protector solar, siempre y aplícalo al menos cada tres horas.

• Falta de sueño: No solo envecejes de forma prematura, también aumentas de peso. Debes dormir al menos 8 horas diarias.
• Estrés por falta de organización: Pasarse la vida corriendo de un lado para otro porque hay mil cosas que hacer, empezarlas y que todas queden a medias resulta en un estrés que solo te suma años. Organízate, prioriza y vive un día a la vez.

Prácticas diarias que sin duda puedes esforzarte por cambiar. ¿Con cuál piensas comenzar el cambio?